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Francia introducirá su impuesto especial para las grandes empresas tecnológicas con la llegada del Año Nuevo, el próximo 1 de enero.
Tres meses antes de la fecha inicialmente prevista, la tasa bautizada como GAFA, acrónimo de las iniciales de Google, Apple, Facebook y Amazon. Además el Gobierno francés prevé gravar los ingresos obtenidos por la venta de datos privados en la red.
Francia espera ingresar el año que viene unos 500 millones de euros por este concepto.
La medida llega en plena tormenta política y social, provocada por las protestas de los llamados "chalecos amarillos" contra la pérdida de poder adquisitivo.
Para calmar los ánimos, el Gobierno francés ha previsto una serie de concesiones para rebajar la carga impositiva.
Todo con un coste de entre 8.000 y 10.000 millones de euros. Tanto dinero que el déficit público superará el techo de gasto.
Francia se adelanta a la Unión Europea que estudia una tasa general para gravar con el 3%, los ingresos de las grandes multinacionales que facturen más de 750 millones de euros anuales.
Bruselas calcula que una compañía tradicional paga en impuestos un 23% de sus beneficios, mientras que las que operan por Internet pagan sólo un 8 o un 9%.
Algunos países como Dinamarca, Suecia o Irlanda, mantienen su bloqueo sobre la propuesta. Se resisten a aplicar una tasa sobre la facturación al entender que puede perjudicar a las empresas con pérdidas.
https://www.imparcialrd.do
Francia introducirá su impuesto especial para las grandes empresas tecnológicas con la llegada del Año Nuevo, el próximo 1 de enero.
Tres meses antes de la fecha inicialmente prevista, la tasa bautizada como GAFA, acrónimo de las iniciales de Google, Apple, Facebook y Amazon. Además el Gobierno francés prevé gravar los ingresos obtenidos por la venta de datos privados en la red.
Francia espera ingresar el año que viene unos 500 millones de euros por este concepto.
La medida llega en plena tormenta política y social, provocada por las protestas de los llamados "chalecos amarillos" contra la pérdida de poder adquisitivo.
Para calmar los ánimos, el Gobierno francés ha previsto una serie de concesiones para rebajar la carga impositiva.
Todo con un coste de entre 8.000 y 10.000 millones de euros. Tanto dinero que el déficit público superará el techo de gasto.
Francia se adelanta a la Unión Europea que estudia una tasa general para gravar con el 3%, los ingresos de las grandes multinacionales que facturen más de 750 millones de euros anuales.
Bruselas calcula que una compañía tradicional paga en impuestos un 23% de sus beneficios, mientras que las que operan por Internet pagan sólo un 8 o un 9%.
Algunos países como Dinamarca, Suecia o Irlanda, mantienen su bloqueo sobre la propuesta. Se resisten a aplicar una tasa sobre la facturación al entender que puede perjudicar a las empresas con pérdidas.
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