También el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, jaleó las protestas y publicó un vídeo que parecía mostrar esas manifestaciones.
“La voz del pueblo iraní está clara. Están hartos de las mentiras del régimen, de su corrupción, su ineptitud y la brutalidad de los Guardianes de la Revolución bajo la cleptocracia de @khamenei_ir”, escribió Pompeo en un tuit, citando la cuenta de Twitter del ayatolá Alí Jameneí.
“Estamos del lado del pueblo iraní, que merece un futuro mejor”, añadió.
Mientras, un alto funcionario estadounidense condenó rotundamente el hecho de que Irán derribara accidentalmente el avión ucraniano con 176 personas a bordo que se estrelló el pasado miércoles al sur de Teherá.
“Esta es una tragedia terrible. Irán cometió un error horrible”, dijo a Efe ese funcionario, que pidió el anonimato. “La negligencia de Irán ha tenido de nuevo consecuencias devastadoras. Es más importante que nunca que Irán abandone sus ambiciones negligentes y empiece a comportarse como un país normal”, agregó la fuente.
Al admitir este sábado que derribó el avión, Irán atribuyó el suceso a “un error humano”, al confundirlo con un misil de crucero debido a la situación de alerta reinante por la escalada de la tensión con Estados Unidos tras el asesinato del general iraní Qasem Soleimaní.
El “mea culpa” llegó después de dos jornadas en las que las autoridades iraníes negaron la hipótesis del derribo, pese a que varios países como Canadá ya habían denunciado que un misil tierra-aire alcanzó el avión.