Ante el aluvión de clientes debido a la crisis del coronavirus, algunas tiendas se han visto obligadas a imponer medidas extremas.
Incluso una fábrica en Austria permanece abierta las 24 horas para producir hasta 6.000 rollos de papel higiénico al día.
Para lograrlo, la fábrica de Essity, una compañía de productos de higiene, en Austria, recibe dos veces al día 500 toneladas de materia prima para ser procesadas y convertidas en papel higiénico.
Los suministros se transportan en tren y han encontrado una solución para cruzar las fronteras cerradas:
"En el intercambio internacional hemos establecido reglas con nuestros socios, intercambiamos las locomotoras en las fronteras, así no hay contaminación posible y podemos cruzarlas sin esperar largos periodos. De esta forma, se garantiza el tráfico internacional de mercancías", ha asegurado Andreas Matth, presidente de los Ferrocarriles Austriacos.
Esto ha significado un pequeño impulso a la industria del transporte en Austria que, como todas las demás, está luchando por mantenerse tras la disminución de la producción industrial.
Ha encontrado la solución en el transporte de millones de rollos de papel higiénico, pañuelos y papel de cocina.
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