El futuro de Brasil se decide este domingo en las urnas. Son las elecciones más importantes de los últimos tiempos.
El candidato ultraderechista Jair Bolsonaro ha visto cómo su gran rival, Fernando Haddad, ha ido ganándole terreno después de la primera vuelta.
Pero Bolsonaro todavía tiene 8 puntos de ventaja según los sondeos previos a la votación definitiva para liderar el país. Si gana, sería el primer presidente ultraderechista de Brasil desde el fin de la dictadura militar en 1985, algo sobre lo que Haddad advierte a los votantes.
Fernando Haddad, candidato presidencial: "Ya he invitado a todos los demócratas a que se unan a mí. Todo el mundo lo sabe, lo he dicho públicamente, pero también en privado. He invitado a todos los demócratas a que estén conmigo porque creo que Bolsonaro es un gran riesgo institucional."
Haddad sustituye en las elecciones al expresidente Lula da Silva, que cumple una condena de 12 años en prisión por corrupción. Tras la primera vuelta han aumentado las esperanzas de Haddad, pero tendría que recuperar mucho terreno para conseguir superar a Bolsonaro en la votación final.
Mientras, Bolsonaro sigue fiel a su estrategia y está sacando provecho de la condena de Lula.
Jair Bolsonaro, candidato presidencial: "Lo que está en juego no es la democracia. Lo que está en juego es la perpetuación de esta máquina podrida que tenemos aquí, que vive de la corrupción."
Para algunos votantes es una elección simple entre la izquierda o la derecha, para otros es una dura batalla entre un partido manchado por la corrupción y un político al que algunos ven peligrosamente cerca de los militares.
.png)
