Por Lic. Wellington Melo
Hoy más que nunca es determinante para ejercer de manera eficaz el noble oficio de la comunicación, el cumplir estrictamente la clásica función ¨comprobatoria¨ en el manejo de las fuentes periodísticas. Indudablemente que el buen periodismo es el antídoto perfecto para enfrentar las Fake News (noticias falsas) y la posverdad; así como otras acciones que incentivan la desinformación en la era de la internet.
Es más que evidente que el proceso de difusión de los acontecimientos noticiables, ya no lo encabezan de manera exclusiva los medios tradicionales de comunicación; puesto que éstos no tienen la capacidad operativa para tener un reportero en cada lugar donde eventualmente pueda producirse un hecho de interés, mientras que por el contrario, sí puede haber un ciudadano con un teléfono inteligente en cada espacio donde se registra un suceso con las características para ser reproducido y difundido.
Ante la velocidad con que circulan las informaciones en el ciberespacio, ya la batalla no debe ser por el que ofrezca primero la información, sino, quién la sirve con mayores niveles de calidad; más aún cuando observamos que la reproducción de las noticias falsas ha dado un nuevo giro con el surgimiento de una nueva práctica desinformativa llamada deep fake (mentiras profundas).
Las mentiras más profundas afectan directamente el ámbito audiovisual, por lo que maliciosamente cualquier desaprensivo puede introducir el rostro de una persona en un vídeo que comprometa su moral, como en efecto ha sucedido con figuras mundialmente conocidas.
El panorama se torna más complicado cuando se generan estadísticas que indican que las noticias falsas circulan con mucho más rapidez que las veraces, de acuerdo a un estudio realizado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
Además de que debemos profundizar los niveles de verificación de contenidos que circulan en la nube, también es necesario adoptar iniciativas que sirvan de contrapeso a esta perversa mecánica de difusión de la información.
En Colombia se articuló una asociación de periodistas y crearon la plataforma Colombiacheck.com, la cual es pionera en ese país en la línea de trabajo referente al ¨periodismo de chequeo de hechos (fact checking), práctica que contrarresta las noticias falsas y malintencionadas; y que además es una técnica sencilla y replicable que refuerza la competencia mediática de los ciudadanos y de los profesionales de la comunicación.
En tiempos donde se impone el concepto de la infoxicación planteado por Postman y el de Prosumer de Alvin Toffler, es altamente valioso que cada ciudadano comprenda lo pernicioso que pueden ser las noticias falsas para el derecho a la información.
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