Tensión en Barcelona con la visita del Rey. Miles de manifestantes independentistas protestaron este lunes en la ciudad condal contra la presencia de la familia real en los Premios Princesa de Girona. El exterior del Palacio de Congresos, donde tuvo lugar el acto, fue el escenario de una protesta que impedía el acceso a los invitados. Muchos de ellos fueron amenazados al tratar de acceder al recinto, y varios de ellos no pudieron finalmente hacerlo ante el acoso de los manifestantes.
Dentro, el ambiente era bien diferente. Los reyes y la princesa Leonor fueron recibidos con una calurosa ovación por los presentes, una nutrida representación del sector económico del país. Al acto no asistió ningún representante de la Generalitat.
"Estos valores de esfuerzo, responsabilidad, compromiso, respeto y civismo representan sin duda la mejor historia de Cataluña", decía en su intervención en catalán el rey Felipe. "No pueden ser un recuerdo del pasado, sino una realidad efectiva de nuestro presente y de nuestro futuro. Una realidad en la que no hay espacio para la violencia, la intolerancia o el desprecio de los derechos y libertades de los demás".
Tres semanas después de la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes separatistas, Barcelona sigue siendo el epicentro de las protestas independentistas, que han descendido en violencia y que muchos temen puedan reavivarse esta semana con la celebracion de las elecciones generales. El ruido en Cataluña no cesa.
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