Varias detenciones en Irán en relación con el derribo por error de un avión de pasajeros ucraniano cerca de Teherán.
La tragedia, que provocó el pasado miércoles la muerte de los 176 ocupantes, se ha convertido en una cuestión de Estado.
La falta de transparencia en la gestión de la catástrofe ha desatado manifestaciones y críticas contra el régimen, dentro y fuera del país.
El presidente, Hasán Rohaní, ha anunciado la creación de un tribunal especial para este caso.
"El Poder Judicial debe formar un tribunal especial con un juez de alto rango y decenas de expertos. No se trata de un caso ordinario. El mundo entero estará pendiente de este tribunal", ha dicho Rohaní en el Parlamento.
Mientras, la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea mantiene vigente su advertencia sobre los peligros del espacio aéreo iraní.
"En base a la información disponible la recomendación en la situación actual es que sobrevolar Irán a cualquier altitud debe evitarse hasta nuevo aviso, se trata de una medida de precaución", ha explicado el portavoz de la Comisión Europea, Stefan de Keersmaecker.
Otra consecuencia es que las autoridades iraníes están permitiendo a los técnicos internacionales participar en la investigación del siniestro, como ha señalado la presidenta de la Junta de Seguridad del Transporte de Canadá, Kathy Fox: "Desde del principio Irán está permitiendo a los técnicos de nuestra Junta de Seguridad tener un papel más activo del habitual. Por ejemplo, invitando a nuestros expertos a participar en la descarga y análisis del registro de voz de la cabina y de las cajas negras".
Tras dos días de desmentidos, el régimen iraní reconocía el viernes que un misil disparado por "error" desde por su defensa aérea había derribado el aparato.
La presión internacional es máxima para garantizar que Irán realice una investigación transparente, lleve a los responsables ante la justicia e indemnice a los familiares de las víctimas.
Video de cortesía:
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