Parada definitiva para el autobús de campaña de Amy Klobuchar y más gasolina para Joe Biden... Senadora por Minessota, Klobuchar ha abandonado la carrera por la candidatura demócrata a la Casa Blanca horas antes del inicio del "supermartes", una jornada en la que están en juego un cuarto de los delegados demócratas. Klobuchar sigue la estela del exalcalde de South Bend, Pete Buttigieg, que renunció el domingo. Considerados moderados dentro del partido, ambos han dado su apoyo al exvicepresidente Joe Biden, que tuvo un mal inicio de campaña, pero que se recuperó gracias a su contundente victoria en Carolina del Sur.
Ahora encara el supermartes crecido gracias al apoyo de sus antiguos rivales:
"¡Saquémoslo ahora! Ahora, ahora, ahora!", gritaba Biden hablando de Donald Trump ante una multitud entregada.
El cierre de filas del ala moderada del Partido Demócrata en torno a Biden delata la fortaleza de la candidatura del "izquierdista" Bernie Sanders, que encabeza el recuento provisional de delegados con 60, seis más que el exvicepresidente. Sanders sigue siendo favorito en el supermartes y ha martilleado su mensaje en favor de un sistema de salud universal en las horas previas a la gran cita electoral en 14 estados del país:
"Es una vergüenza internacional que Estados Unidos sea el único país importante de la Tierra que no garantice el cuidado de la salud a todos", afirmaba.
Las espadas están en alto y en el duelo también participan la progresista Elizabeth Warren y el multimillonario Michael Bloomberg, que no ha dudado en rascarse el bolsillo para aumentar sus opciones.
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