Andrés Manuel López Obrador, con mascarilla, de camino a Washington para reunirse con Donald Trump. El presidente mexicano ha viajado en un vuelo comercial, entre la curiosidad de los pasajeros, dando pie a una imagen curiosa. Antes, por exigencias de la Casa Blanca, ha tenido que pasar un test de covid-19.
Este es el primer viaje oficial de López Obrador en 19 meses que lleva en la presidencia. El objetivo principal es celebrar la entrada en vigor el pasado 1 de julio del nuevo tratado de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá.
"Tuvimos la suerte de que, con esta pandemia que nos ha afectado, que tumbó la economía mundial, estemos ahora llegando a este acuerdo para impulsar las actividades productivas y crear empleos en América del Norte. Por eso es muy importante la visita", dijo AMLO en rueda de prensa.
¿Un apuesta estratégica o un viaje inútil y arriesgado?
En plena pandemia de covid y con las consecuencias económicas que se avecinan, a México le conviene estar a bien con su principal socio comercial y económico.
Sin embargo, numerosas voces critican el momento elegido para el encuentro, a solo cuatro meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos en las que Trump se juega la reelección. Consideran que es un viaje con pocas ventajas, que además puede resultar arriesgado.
"Simbólicamente, no estoy seguro de lo que López Obrador busca conseguir -se pregunta el analista Tony Payan, director del Centro para Estados Unidos y México de la Universidad Rice-. ¿Quedar bien? No estoy seguro de que lo logre. Trump es muy bueno la hora de dar la vuelta a la situación, de tal manera que parezca que es él que se anota el tanto y no México. La otra cuestión es ¿qué logros concretos podemos esperar? ¿Podemos esperar que los presidentes anuncien un acuerdo, un cambio de política o un cambio sustancial en su relación? No lo creo".
Mexicanos dolidos por los desplantes e insultos de Trump
Sin olvidar que el presidente estadounidense no ha ahorrado ataques durante su mandato contra México y los inmigrantes mexicanos, y ha hecho de su muro fronterizo un eje central de su mandato. La cuestión migratoria ha sido, de hecho, motivo de tensión entre los dos gobiernos.
Hace solo unos días, Trump dijo que el muro había servido también para frenar el avance de la covid. Una afirmación curiosa, pues, de los dos países, Estados Unidos es el más afectado por la pandemia y sufre, en estos momentos, una explosión de casos en los estados del sur.
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