Más de 100.000 protestaron el viernes en Varsovia contra la restricción de la ley del aborto
Aún resuenan en Polonia los ecos de la multitudinaria manifestación antigubernamental que recorrió anoche las calles de Varsovia. Más de cien mil personas protestaron contra el fallo del Tribunal Constitucional que prohíbe abortar en caso de malformación grave del feto, una decisión que muchos interpretan como un retroceso en los derechos de la mujer. Es la mayor manifestación antigubernamental que se produce en Polonia desde la llegada del Partido Ley y Justicia (PiS) al poder, hace cinco años.
"Se acabó el tiempo para alcanzar un compromiso. Les han quitado derechos a las mujeres y ahora quieren recuperarlos, quieren más derechos", explicaba un joven que participaba en la marcha.
Los manifestantes vuelcan su ira contra el Gobierno ultraconservador del Partido Ley y Justicia (PiS), que está muy influenciado por la Iglesia Católica. En los últimos años, el PiS ha puesto patas arriba el sistema judicial acabando de facto con su independencia, lo que ha generado continuos roces con Bruselas. También se ha disparado la tensión en el seno de la sociedad polaca. Grupos de ultraderechistas lanzaron ayer bengalas contra la multitud que participaba en la protesta, que, en su mayor parte, se desarrolló pacíficamente.
Antes del fallo del Constitucional, Polonia ya tenía una de las leyes de aborto más restrictivas de Europa.
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