By: Freddy Tapia
Santo Domingo, RD.- Si al entrenador Marcos Kweik le pusieran un examen de selección múltiple para evaluar el desempeño que tuvieron “Las Reinas del Caribe” en el año que ya se alista para decir adiós, él no titubearía para seleccionar la opción “B”.
A) Excelente B) Bueno C) Regular D) Mala E) Ninguna de las anteriores.
“Fue un año bueno. A pesar de las dificultades que confrontamos para entrenar por la pandemia del Covid-19, hemos tenido buenos resultados”, declaró Kweik , quien hoy retorna a Sao Paulo, Brasil, para pasar las navidades con la familia.
Como prueba al canto resalta el sexto lugar que obtuvo la selección nacional femenina de voleibol en la Liga de Naciones, con foja de 9-6, el mejor de su historia, aun cuando fue el primer torneo en el que participaron en 18 meses y sin fogueo alguno.
Con esa actuación, “las muchachas” hubieran clasificado en la justa celebrada durante el mes de mayo en la ciudad italiana de Rimini, pero a partir de este año se determinó que solo cuatro asisten al baile de la postemporada.
El séptimo escalón que ocupan en el escalafón de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB), también es el más alto alcanzado por el proyecto que el empresario Cristóbal Marte y el calificado técnico cubano Jorge Pérez Vento iniciaron en 1994.
El ranking lo encabezan Estados Unidos (1), Brasil (2), China (3), Turquía (4). Serbia (5) e Italia (6). A esos países de grandes economías les sigue República Dominicana (7), “una frescura”, dicho en buen dominicano.
“La posición que nosotros ocupamos es algo que nos enorgullece muchísimo porque no es fácil, no es fácil, mantenerse entre los primeros diez”, recalca Kwiek al hacer una aparte de los entrenamientos que realizaba el equipo en el viejo pabellón de voleibol del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, un lugar oscuro, sin baños adecuados para que al menos ellas puedan darse un buen baño luego de las prácticas, con el taraflex en malas condiciones y rociados de vez en cuando por estiércol de palomas desde el techo.
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