TORONTO -- En el rol actual de Cavan Biggio con los Blue Jays, la única constante es el cambio. Y navegar a través de eso requiere un conjunto de habilidades propio.
El objetivo principal es estar preparado para cuando surja la oportunidad, que es justo lo que Biggio logró en la victoria por 5-2 del lunes por la noche en el Rogers Centre.
Su explosión de tres carreras en la cuarta entrada fue el catalizador de la victoria de los Azulejos sobre los Medias Blancas. El segundo tiro de Biggio del año, fue el tipo de tiro que puede cambiar el rumbo y generar confianza, para él y la mitad inferior de la alineación de Toronto.
“Cuando miras mi papel, estoy [constantemente] dentro y fuera de la alineación”, dijo Biggio. “Y obviamente no estoy donde quiero estar con mi swing. Pero estoy trabajando en la jaula, trabajando en mi swing y tengo que aprender a separar los dos. Entonces, cuando llego a la caja de bateo, puedo ver bien la pelota y competir”.
Ha sido un comienzo de temporada lento para Biggio, quien tiene un OPS de .491 en 14 juegos como jardinero suplente y segunda base. A medida que la alineación repleta de estrellas de Toronto continúa acumulando números sólidos, Biggio ha tenido que adaptarse tanto mental como físicamente a la falta de turnos al bate consistentes.
Es posible que los resultados no estén allí desde el principio, pero su gerente no pasa desapercibido.
“Sé que el tiempo de juego es un poco aquí y allá con él y un par de otros muchachos”, dijo el viernes el manager John Schneider. “Hablé con Cavan en Houston y le dije: 'Amigo, nunca me rendiré contigo. Nadie es.' Para él, solo se trata de hacer que caigan algunos hits y confiar en el lanzamiento correcto”.
Biggio encontró el lanzamiento correcto en la cuarta entrada.
El abridor de los Medias Blancas, Lance Lynn, lanzó tres rectas consecutivas, dos de las cuales Biggio falló. Después de un cambio en la tierra para la bola uno, Lynn colgó una bola curva que Biggio envió al jardín derecho para un golpe de tres carreras que puso a los Azulejos arriba 4-2.
“Está trabajando de la manera correcta”, dijo Schneider después del partido del lunes. “No ha tenido el comienzo que quería. Pero, ya sabes, le dije y le dije a todos: 'Nunca voy a dejar de creer en ustedes'.
“Obtuvo un lanzamiento que podía manejar, lo aprovechó. Te encanta ver eso. Fue una pequeña sacudida para el banquillo, y obviamente genial para Cavan”.
Sin embargo, fue la paciencia de Alejandro Kirk lo que hizo que las cosas comenzaran.
Los Azulejos perdían 2-0 con dos outs en el cuadro cuando su receptor, quien tiene la habilidad de embasarse incluso en tramos en los que su poder lo elude, consiguió una base por bolas de seis lanzamientos para traer a Brandon Belt, quien fumó un sencillo en la primera oferta de Lynn.
Luego, Kirk anotó desde segunda con un doble RBI de Whit Merrifield que abrió el telón para el momento brillante de Biggio.
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