CHICAGO - La palabra "inspirador" viene a la mente cuando se habla de una victoria de 6-2 de los Medias Blancas sobre los Tigres el domingo por la tarde en el Guaranteed Rate Field que completó una barrida en la División Central de la Liga Americana el fin de semana.
Inspirador en el hecho de que Jake Burger conectó un grand slam ante el cerrador de Detroit, Alex Lange, para llevarse la victoria, marcando el primer slam de su carrera y su primer jonrón que puso fin al juego. Es el mismo Burger que se abrió camino a través de dos lágrimas en el tendón de Aquiles izquierdo y no jugó entre 2018 y 2020.
Y, por supuesto, inspirador con Liam Hendriks obteniendo la victoria trabajando un noveno perfecto y lanzando en juegos consecutivos por primera vez desde que venció el linfoma no Hodgkin.
Esta victoria de Hendriks también sucedió en el Día Nacional de los Sobrevivientes de Cáncer.
“Eso es algo bastante especial”, dijo Hendriks. “Tan pronto como te diagnostican, te consideran un sobreviviente. Has vivido esto. Con suerte, puedo seguir avanzando y continuar un poco al menos haciendo lo correcto en el campo y dar a algunas personas algo de esperanza para seguir luchando”.
“Salió y volvió a su ser auténtico, levantando el puño y gritando un poco”, dijo el lanzador abridor de los Medias Blancas , Michael Kopech . “Eso es lo que todos esperábamos ver, y lo dejó salir”.
Kopech marcó la pauta para esta victoria, permitiendo dos carreras en el cuadrangular de la cuarta entrada de Spencer Torkelson y nada más en siete entradas. Ponchó a nueve y caminó a uno, dándole una carrera de cuatro aperturas de 26 1/3 entradas lanzadas, 11 hits permitidos, seis carreras limpias, 38 ponches y solo cuatro bases por bolas en 95 bateadores enfrentados.
El bateador emergente Andrew Benintendi comenzó la jugada ganadora del juego con un sencillo y pasó a segunda con un lanzamiento descontrolado de Lange. Un out más tarde, el bateador emergente Yoán Moncada y Tim Anderson obtuvieron bases por bolas contra el relevista del mes de la Liga Americana y un lanzador que había logrado que los Medias Blancas persiguieran constantemente esta temporada.
Burger sacó una bola rápida de primer lanzamiento fuera de la zona y luego lanzó una curva hacia el jardín central izquierdo. No había duda de que el juego había terminado, pero había alguna duda de que el avance de 385 pies de Burger despejara la valla.
“Honestamente, de buenas a primeras, no pensé que se estaba dando a conocer”, dijo Burger. “Pensé que iba a estar fuera de la pared; un solo Se apagó, y todavía estoy tratando de recuperarme un poco”.
“Cuando te quedas atrás con la bola rápida, probablemente solo esté sentado sobre ella”, dijo Lange. “Jake es un muy buen bateador; [He] jugado contra él durante mucho tiempo. Me ha visto mucho y le ha dado un buen swing a la pelota. A estos muchachos también se les paga por batear. Ese es un buen swing de él".
Burger se ponchó en cada uno de sus primeros tres turnos al bate. Pero una base por bolas en su cuarta aparición en el plato lo devolvió a la posición ofensiva.
"Al entrar en el quinto, no quiere rebotar ni dejar pasar un pase", dijo Burger. “Simplemente una especie de zona en un lugar y, con suerte, él la lanza y disminuye la velocidad.
“Si está en la zona, [Burger] va a causar algún daño”, dijo Hendriks. “Él no extraña los errores. Algunos lanzamientos que está bateando no han sido errores. Son buenos lanzamientos. Simplemente muestra el talento que tiene. Es una historia inspiradora. Han pasado muchas cosas para llevarlo a este punto”.
La victoria del domingo le dio a los Medias Blancas un récord de 12-7 en una racha de 19 juegos con 16 juegos contra oponentes de división. Mejoraron a 26-35 en general, pero también se colocaron a cinco juegos y medio de los Mellizos, líderes de la División Central de la Liga Americana, que cayeron a dos juegos por encima de .500 con una derrota ante Cleveland el domingo.
El negocio se recupera a partir del martes en el Yankee Stadium sin oponentes de la División Central de la Liga Americana en el calendario hasta el 21 de julio en Minnesota. Chicago espera que el éxito de este fin de semana, impulsado por Burger y Hendriks, genere cierto impulso.
“En este momento, el objetivo es jugar buen béisbol y ganar todos los juegos que podamos. Como sea que los consigamos, los tomaremos”, dijo Kopech. "Obtuve un barrido esta vez, y eso es importante para que sigamos adelante".
“Estos son oponentes de división. Acabábamos de enfrentarlos. Perdimos tres de cuatro allá”, dijo el manager de los Medias Blancas, Pedro Grifol. “Así que fue una buena manera de regresar y usar parte de la ventaja de jugar en casa que tenemos aquí con nuestros fanáticos para ganar tres juegos”.
